El presidente Javier Milei saludó al papa Francisco en la Basílica de San Pedro durante la ceremonia de canonización de María Antonia de San José de Paz y Figueroa, también conocida como Mama Antula, quien se convirtió en la primera santa argentina de la historia.
Milei, en su calidad de jefe de la delegación argentina, saludó al pontífice en la sacristía de la basílica vaticana. Durante el encuentro, el presidente expresó: “Es un momento muy importante para la historia argentina”. Acompañaban a Milei autoridades como la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, la canciller Diana Mondino, el ministro del Interior Guillermo Francos y la ministra de Capital Humano Sandra Pettovello, entre otros.
Durante la misa de canonización, el presidente Milei estuvo sentado en la primera fila junto al Papa Francisco. Como parte del protocolo, Francisco proclamó: “Declaramos y definimos santa a la beata María Antonia de Paz y Figueroa y la inscribimos en el catálogo de los santos”.
Tras la ceremonia, el Papa se acercó a saludar a Milei, quien se encontraba en silla de ruedas, antes de abandonar la Basílica. Ambos se despidieron con un abrazo, previo a la cumbre entre ambos. Francisco también saludó a otros miembros de la delegación argentina, como Karina Milei y Guillermo Francos.
María Antonia de Paz y Figueroa, Mama Antula, fue canonizada por el papa Francisco en el Vaticano y se convirtió en la primera santa argentina de la historia. La Iglesia comprobó al menos dos milagros realizados por Mama Antula, lo que llevó a su canonización. Uno de los milagros fue la curación de la hermana Vanina Rosa de las Hijas del Divino Salvador en 1905, y el otro fue la sanación de un hombre que sufrió un accidente cardiovascular en Santa Fe. Los médicos no encontraron explicación científica para estas curaciones, lo que llevó a la beatificación de Mama Antula en 2016 y su canonización posterior.