El ministro de Desarrollo Social, Federico Masso, anunció medidas más estrictas en el control de la distribución de alimentos para evitar situaciones como la reciente venta ilegal de mercadería destinada a comedores escolares en Tucumán.
Masso proporcionará a la fiscalía los nombres de quienes retiren más de cinco módulos de alimentos para una auditoría. Además, dos trabajadores sociales del ministerio se unirán a organizaciones y asociaciones para supervisar la entrega adecuada de la mercadería. El objetivo es garantizar que los alimentos lleguen a quienes los necesitan y se utilicen para alimentar a las personas durante un mes.
El ministro se comprometió a llegar al fondo del problema y colaborar con la justicia, poniendo a disposición las resoluciones de compra con detalles de las marcas y vencimientos de la mercadería. La investigación se inició hace 15 días, tras observar ofertas de alimentos provenientes de la repartición estatal en redes sociales.
Aunque no se tiene una cifra exacta del monto representado por la mercadería incautada, Masso aseguró que cualquier infractor, sin importar la cantidad robada, enfrentará las consecuencias legales.
Las críticas no se hicieron esperar, con el referente del Polo Obrero provincial, Gabriela Gramajo, señalando que los responsables del robo de alimentos destinados a comedores escolares están vinculados al gobierno.
Gramajo expresó que la crisis ha llevado a un aumento en la afluencia a los comedores barriales, y acusó a los gobiernos anteriores y actuales de priorizar la entrega de alimentos a sus afiliados, perjudicando a organizaciones sociales independientes.
Fuente: La Gaceta
