La investigación por el crimen de Ariel Hernán Sierra, el hombre de 31 años que perdió la vida el pasado lunes en El Manantial, cuando recibió un disparo mientras viajaba en un auto con amigos, dio un giro inesperado.
El día del hecho, el conductor del auto en el que viajaba Sierra había declarado en la comisaría que fueron interceptados por dos delincuentes a bordo de una moto que intentaron asaltarlos. Para escapar de la situación -dijo el conductor- aceleró la marcha del auto y en ese momento los ladrones comenzaron a disparar, hiriendo mortalmente a la víctima.
Sin embargo, el peritaje balístico realizado por los peritos del Ministerio Público Fiscal estableció que la dirección del impacto involucra a las personas que estaban dentro del auto. más tarde, una nueva pericia confirmó la presencia de residuos de pólvora dentro del vehículo.
El martes prestó declaración Pablo Ezequiel Barrionuevo, el joven de 23 años que conducía el VW Gol donde se registró el hecho de sangre. Dijo que había dos personas más dentro del vehículo cuando se produjo el hecho.
Luego de su declaración, la Fiscalía en Homicidios II, a cargo de Adriana Giannoni, solicitó la detención de Barrionuevo, que fue confirmada por el juzgado interviniente.
Según la pericia balística, de acuerdo a la trayectoria del proyectil al impactar en el asiento y herir mortalmente a la víctima, no sería factible lo declarado por el conductor del auto.
En consecuencia, desde la Fiscalía interviniente se ordenó la aprehensión de esta persona, como así también el secuestro del VW Gol.
