El pequeño Luca Martín Triulzi, de 2 años, sufrió neuroblastoma y debe someterse a un autotrasplante de médula, cuyo tratamiento es vital para que la enfermedad no le vuelva a aparecer. Para realizar ese procedimiento en el niño oriundo de la localidad bonaerense de José C. Paz, es indispensable un insumo que se encontraba retenido por la Aduana.
Este miércoles su madre, Natalia Bello, inició una fuerte campaña para lograr que el organismo libere el Dimetil sulfóxido (DMSO) que retenía. A través de las redes sociales creó el hashtag #TodosPorLuca para hacer fuerza para solucionar el problema y logró gran repercusión.
“Queremos compartir nuestra alegría por haber logrado liberar el insumo necesario para Luca y para tantos chicos. Gracias a la ayuda de todos pudimos hacerlo en tiempo récord”, escribió en Facebook Mauro Triulzi, papá de Luca, y afirmó sentirse “aliviado”.
Agregó: “Les podemos asegurar que Luca y todos los chiquitos que padecen esta enfermedad nos enseñan todos los días a no bajar los brazos y a luchar aún más frente a todas las adversidades. Cuando todos nos movilizamos logramos mover montañas”.
El padre confirmó al diario Clarín que la medicación ya llegó al Hospital Garrahan, que “da bronca luchar contra la enfermedad y que encima aparezcan estas trabas” y que el nene comenzará este viernes con el tratamiento de preparación, por lo que a mediados de la semana que viene se le haría el autotrasplante a Luca.
La familia, asimismo, pidió que el insumo pueda llegar a todos los hospitales, más allá del caso de Luca. “La Aduana se movió de manera urgente al enterarse del problema y lo resolvió. Queremos remarcar que no fue problema de Aduana, sino un problema de catalogación de un despachante, ya que al insumo lo pusieron con otro nombre. Aun así la Aduana se involucró y el insumo finalmente fue liberado”, dijo a este diario Cecilia Borel, vocera del director de Aduana.
Luca tiene dos años y en octubre de 2016 le diagnosticaron neuroblastoma, un tumor maligno que ataca el sistema nervioso central. En el caso de Luca, esta enfermedad estaba alojada en la zona del abdomen. Lo operaron en el Hospital General de Niños Ricardo Gutiérrez y le extirparon el tumor.
Sin embargo, en diciembre le descubrieron contaminación en ganglios y médula osea, por lo cual hizo seis sesiones de quimioterapia, que tuvieron un resultado favorable.
Para consolidar ese resultado se hace un trasplante de médula ósea autólogo, que se realiza 45 días después de la última quimioterapia. Esa fecha que se cumple el 16 de junio. Si se hacía con posterioridad a esa fecha, la enfermedad podría volver a aparecer. Ahora Luca podrá hacerse el tratamiento y seguir luchando.