Graciela Margarita Parientes (42), la niñera acusada de la muerte de un bebé de 10 meses bajo su cuidado, ha sido condenada por el delito de abandono de persona agravado por el fallecimiento de la víctima.
En un juicio abreviado, Parientes aceptó su responsabilidad y fue sentenciada a seis años y seis meses de prisión en suspenso, lo que significa que no irá a prisión de inmediato.
El trágico incidente ocurrió el 9 de junio cuando Parientes estaba cuidando al bebé mientras sus padres trabajaban. A pesar de las advertencias de los padres de no bañarlo, Parientes decidió hacerlo y, mientras estuvo ausente por unos minutos, el bebé se ahogó en la bañera y quedó sin signos vitales.
El bebé fue llevado al hospital donde los médicos lograron reanimarlo, pero advirtieron a los padres que sufriría daños neurológicos irreversibles. Trágicamente, el bebé falleció el 28 de julio.
Inicialmente, Parientes fue acusada de abandono de persona, pero después de la muerte del bebé, la acusación cambió a abandono de persona agravado por el fallecimiento.
Se intentó llegar a un acuerdo de juicio abreviado, pero el primer juez no lo aceptó debido a la falta de detalles precisos sobre el incidente y la condena propuesta.
Finalmente, en una nueva audiencia, el segundo juez aceptó el acuerdo de juicio abreviado. La evidencia presentada mostró que Parientes había puesto en peligro la vida del bebé al dejarlo solo en la bañera, lo que llevó a su ahogamiento.
El querellante, los defensores y el Ministerio Público Fiscal estuvieron de acuerdo con el juicio abreviado. El juez Maggio, considerando la rapidez requerida en casos que involucran a niños, finalmente aceptó el acuerdo y condenó a Parientes a seis años y seis meses de prisión en suspenso.