Dos policías murieron acribillados a balazos en un confuso hecho que no tiene precedentes en Tucumán. El sargento primero Cristian Peralta y el cabo primero Sergio Páez González pertenecientes a la patrulla 911 cayeron bajo las balas de un desconocido que les disparó a quemarropa mientras-se cree-pretendían inspeccionar un vehículo que estaba detenido en la rotonda sobre el frente del predio de Obispo Molina en el Parque 9 de Julio.
El violento ataque se produjo en la madrugada de este martes y varias divisiones acudieron al lugar alertadas por lo que sucedía pese a que el vehículo desde donde disparó el doble homicida ya se había marchado.
La primera versión indica que los policías a bordo del móvil 0521 de la Patrulla 911 habían acudido al lugar alertados por un llamado sin embargo, esto no pudo ser confirmado aún oficialmente. Uno de los ocupantes del vehículo-una camioneta de marca japonesa que está siendo buscada-realizó varios disparos primero contra uno de los policías y después contra el otro que intentó escapar desesperadamente.
— fabian paez (@hfabianpaez) February 13, 2018
Los efectivos recibieron dos impactos de bala cada uno y tanto Peralta como Páez González fueron auxiliados e intentaron realizárseles maniobras de reanimación que terminarían siendo en vano. El primero falleció en el hospital Centro de Salud mientras que el segundo cuando era conducido de emergencia al hospital Padilla.
Un testigo -un transexual que habría presenciado el hecho-proporcionó detalles a la fiscal Adriana Reinoso Cuello respecto a los detalles del sangriento ataque. El hecho causó gran conmoción dentro de la fuerza. “Esto nunca pasó en Tucumán…estamos desconcertados”, indicó una alta fuente policial consultada por Tuc Sin Filtro.
