Un terrible y hasta ahora inexplicable hecho tuvo lugar en la zona de “La Hoya”, en Yerba Buena este lunes. Una mujer asesinó a su vecino apuñalándolo en el corazón por motivos que se desconocen.
El resto del vecindario mantuvo la boca cerrada ante las preguntas de la Policía, mientras personal de Criminalística retiraba el cuerpo, el lunes al mediodía.
El crimen fue cerca del mediodía cuando José Tomás Ruiz salió de su casa para dirigirse al hospital Carrillo. “Iba a hacerse curar la pierna porque tenía erisipela”, explicó Elizabeth Ponce, su hermana.
El hombre sacó su motocicleta y en la vereda se encontró con su vecina de al lado, con quien comenzó a discutir. Los motivos del altercado eran un misterio hasta este lunes, ya que nadie quiso hablar acerca del tema.
Según el relato de Ponce, la vecina le gritó “¡ahora te voy a matar!” y sacó un cuchillo. “Él giró el cuerpo para salir con la moto, pero ella se le vino encima y lo apuñaló directo en el corazón”, agregó la hermana de la víctima. Ensangrentado, Ruiz corrió hacia su casa pero no llegó a entrar y se desvaneció en el jardín.
“Esa es una señora que no sirve, con todo el mundo peleaba y todos le tienen miedo aquí en el barrio, por eso nadie quiere hablar ni decir lo que pasó”, aseguró Ponce. “La semana pasada, esta señora lo mató a puñaladas al perro de mi hermano porque ladraba mucho; es una persona muy mala”, agregó, consternada.
Minutos después llegó la Policía y se encontró con el cuerpo de Ruiz tendido sobre el pasto. La esposa del hombre lloraba al lado suyo, sin poder creer lo que había sucedido. A medida que fueron llegando otros allegados a la víctima, los ánimos se fueron caldeando y debió intervenir personal de Infantería para evitar que le prendieran fuego a la casa de la sospechosa.
Personal de la división Homicidios, dirigida por los comisarios Hugo Cabezas y Daniel Cuellar, aprehendió a la presunta autora del crimen, de 46 años, y secuestró el cuchillo con el que fue asesinado Ruiz. Ahora la mujer deberá explicarle al fiscal Arnoldo Suasnábar por qué la señalan como la responsable de la muerte de su vecino.
La víctima tenía 27 años, se ganaba la vida como albañil y sus amigos y familiares lo llamaban por su apodo: “Cuqui”. El lunes esperaban que les entregaran el cuerpo para velarlo en la casa de su madre.
