Hoy se cumple un año del atentado contra Cristina Fernández de Kirchner. En la investigación, hay tres personas acusadas que aún esperan juicio, y persisten preguntas sobre si hubo alguien que ideó el ataque y el papel de la seguridad en esa noche de septiembre de 2022.
En el incidente, un arma se disparó cerca de la vicepresidenta mientras saludaba a seguidores kirchneristas en su casa. Afortunadamente, no se disparó porque no había una bala en la recámara.
Dos de los acusados, Fernando Sabag Montiel y su novia Brenda Uliarte, siguen en prisión. Sabag Montiel está aislado en la cárcel y no recibe visitas de familiares. Se les acusa de intentar asesinar a Cristina Fernández de Kirchner hace un año, y están a la espera de un juicio que aún no tiene fecha.
Un tercer detenido, Nicolás Carrizo, quien trabajaba con Sabag Montiel vendiendo productos en la calle, también está en prisión, acusado de ser cómplice en el ataque. La fiscalía considera que el grupo no contaba con financiación externa para llevar a cabo el intento de homicidio.
Se estima que el juicio oral por el atentado podría llevarse a cabo en 2024, según informaciones de fuentes judiciales. En las próximas semanas, el Tribunal Oral Federal 6, encargado del caso, solicitará a las partes que presenten la evidencia que deseen usar en el juicio. La fiscalía pedirá más pruebas. Luego, los jueces decidirán qué evidencia admitir y programarán la fecha del juicio, que también podría influir en la selección de los jueces que participarán.
Cristina Kirchner ha expresado su descontento con la investigación y cree que falta identificar al autor intelectual del ataque, apuntando hacia el partido político PRO. Sus demandas se centran en la llamada pista Milman, que involucra al diputado del PRO Gerardo Milman, basada en una frase que un testigo, asesor del Frente de Todos, afirmó haber escuchado en un bar cerca del Congreso 48 horas antes del ataque: “Cuando la maten, yo voy a estar en la costa”.
