La sequedad del ambiente, la polución, los cambios bruscos de la presión, las rinitis, el uso de medicamentos como aspirinetas, pueden ser alguno de los motivos por los que pueden producirse las hemorragias nasales, es decir que no es necesario que la persona tenga una enfermedad en particular para que esto ocurra, así lo explica la responsable del servicio de Otorrinolaringología del hospital Avellaneda, María Alejandra Maciel.
Además, la especialista dijo que los casos más comunes se dan por traumatismos y desviaciones del tabique que promueven que el aire que pasa degrade la mucosa levemente y produzca el sangrado.
La otorrinolaringóloga también indicó que hay niños que son alérgicos y al rascarse con el dedo causan la lesión produciendo la pérdida. ¨Hay episodios que son menores, como el pequeño sangrado cuando nos sonamos la nariz, donde no hay riesgos de salud; y hay casos donde se llegan a eliminar grandes cantidades, incluso con coágulos¨, explicó la especialista.
Respecto a cómo actúa la médica ante una consulta por sangrado, dijo que, primero, hace que el paciente se suene la nariz y se lave con agua fría en el lavabo que tiene en el consultorio para luego realizarle una rinoscopia mediante la cual pueda determinar cuál es el vaso que está sangrando y decidir el tratamiento.
La referente aconsejó que, ante un episodio de sangrado, lo recomendable es no hacer la cabeza para atrás, ya que la sangre puede salir por la faringe y expulsarse por la boca. ¨Lo ideal es lavar la nariz con agua fría, poner un tapón de algodón y apretar las alas nasales por cinco minutos que dura el tiempo de coagulación¨.
Por último, Maciel dijo que el servicio de Otorrinolaringología trabaja de martes a viernes, de 8 a 12 horas con turnos programados solicitados mediante la línea gratuita del Ministerio de Salud Pública Salud Escucha (0800-4444-999).