Dos videos difundidos esta noche revelaron manejo de varios millones de dólares que pasaron durante 2012 porLa Rosadita, la financiera que funcionaba en el edificio Madero Center, Juana Manso 555, en Puerto Madero. En las imágenes se lo puede ver a Daniel Pérez Gadín, un contador que trabajó para la familia Kirchner, y a Martín Báez, el hijo del contratista de obra pública Lázaro Báez, observando el trabajo de una máquina contadora de billetes.
Las impactantes imágenes fueron presentadas por el periodista Jorge Lanata en el programa Telenoche, de Canal Trece. Son dos videos en los que se ve a Pérez Gadín, el contador de Báez que quedó a cargo de La Rosadita, tras una disputa con Federico Eláskar y Leonardo Fariña.
En el primer video del 3 de noviembre se ve el prolijo recuento de 3,5 millones de dólares que habían llegado a una oficina de la financiera en bolsos. Tras una cuidadosa contabilidad, los paquetes de plata son vueltos a guardar en los mismos bolsos. En esa faena –que dura casi una hora–, a los mencionados los ayudan al menos tres personas. La plata está en paquetes de 100 mil dólares, que los involucrados deben abrir para empezar el conteo. Son 40 minutos en los que nadie muestra ningún comportamiento inquieto, como habituados a este tipo de operaciones.
En el segundo video se puede ver a los involucrados contando dinero en dos ocasiones. En el primer día, retiran de una valija 21 fajos de 100 mil dólares, es decir, 2.100.000 dólares. Lo llamativo de esta ocasión es verlo a Pérez Gadín abrir una botella de whisky, servirle una copa a Báez y brindar con él. Mientras, los empleados y el hijo de Pérez Gadín cuentan con tres máquinas.
Se los ve a los presentes en las oficinas de La Rosadita sacar las gomitas de los fajos y separar de a 10 mil dólares para que las máquinas no se traben. Cuando finaliza el conteo, los empleados de la financiera se llevan el dinero.
Durante el otro día que muestra la grabación, la operación se repite pero con más dinero. Esta vez son tres millones de dólares que los separan en torres de medio millón arriba de una mesa. Esta vez, contar los tres millones demoró 22 minutos.