Un argentino fue multado con más de 8.500 dólares por intentar revender entradas del Mundial de Rusia para el partido que disputaron en San Petersburgo Suecia y Suiza, por los octavos de final.
Las autoridades de la ciudad de San Petersburgo indicaron en un comunicado que el acusado había infringido el Código de Infracciones Administrativas de la Federación de Rusia.
Un juez de paz de San Petersburgo imputó de “responsabilidad administrativa” al argentino, por la infracción al artículo 14.15.2 del citado código, “y le asignó un castigo en forma de multa por un total de 542.990 rublos (8.589 dólares)”, señaló la nota divulgada por el departamento ruso y dada a conocer por el portal Sputniknews.com.
Según la ley rusa, ese artículo de infracciones administrativas prevé una penalización por la venta ilegal de entradas para los partidos del Mundial o de los documentos que permitan obtener estos pases a los encuentros.
En ese sentido, la multa puede ser de una cantidad que multiplique entre 20 a 25 el precio oficial de la entrada, pero nunca menor de 50.000 rublos (unos 790 dólares).
El hincha argentino, cuyos datos no trascendieron, fue encontrado “in fraganti” intentando vender entradas en el partido que el martes pasado disputaron Suecia y Suiza por los octavos de final, aunque los medios de prensa no indicaron qué precio originalmente tenían las entradas que quería revender, aunque sí que quería conseguir 450 dólares por cada una de ellas.
Uno de los focos en donde más quisquillosa se puso la FIFA fue en la reventa de entradas para los partidos del Mundial, cualquiera sea la fase.
De hecho, muchos argentinos fueron vistos en el partido entre Croacia y Dinamarca, dado que ese hubiera sido el eventual duelo de la Selección si salía primero en el Grupo D.
La FIFA tiene un procedimiento oficial de reventa y aquellos hinchas que querían devolver las entradas podían hacerlo a través del sitio oficial, pero claro que recibirán un reembolso de valor nominal, menos una tarifa de proceso del 10%.
