“Ayer a la noche entraron a robarnos. Como no había absolutamente nada en casa, se llevaron la cpu de la computadora, donde tengo toda la vida de Martina en fotos, los videos donde me dice mamá, los elementos con los que Joaquín conoce a su hermana… Estoy muy dolida”. Ése fue el mensaje que Yemina Terragni publicó en su perfil de Facebook cinco días atrás, lamentando perder lo único que le quedaba de su pequeña hija Martina, quien falleció en 2015.
Desesperada, Yemila había ofrecido comprar el equipo, pero no fue necesario. “Si alguien sabe que le ofertan una cpu por favor me avisa. Yo la compro”, había suplicado. Hasta que “una mujer, que fue a un lugar donde arreglan computadoras, la consiguió. Se la ofrecieron. La abrió y se dio cuenta que era la mía. Y se comunicó conmigo por Facebook”, dijo.
“Ver a mi hijo saludando a su hermana de nuevo, volver a escucharla llamarme “mamucha” no tiene precio. Gracias, gracias, gracias X 1000″. Así, Yemila, agradeció la aparición de la computadora que atesoraba fotos y videos de su hija Martina, quien murió a los once años en un accidente de tránsito ocurrido en 2015.
“Fue tanta, tanta, la difusión del pedido, que me llamaron de otras provincias. Se ofrecieron especialistas en informática para rastrear la CPU”, cuenta Yemina.
“Cuando prendimos la computadora, Joaquín saludaba a su hermana con una sonrisa. Martina está en el fondo de pantalla”, contó la madre. Joaquín tiene hoy un año y medio. Yemina estaba embarazada de cinco meses cuando sufrió el accidente automovilístico en que murió Martina: el próximo 11 de marzo se cumplen dos años. “Siempre a Joaquín le muestro un video que la hermana grabó para él cuando estaba en la panza. Ese estaba en la CPU”, explicó.
“Cómo poder agradecer esto que han llevado a niveles de repercusión impensables para nosotros. Una parte de nuestra princesa volvió a casa hoy”, comentó la madre ante la cosulta de este diario. “Nos han devuelto su voz. Eso no tiene precio”, afirmó.