La diputada nacional Paula Omodeo (CREO) cuestionó este martes las explicaciones del intendente Gonzalo Monteros sobre la denuncia realizada por la Unidad de Información Financiera (UIF) respecto a un presunto desfalco de $17.000 millones en la Municipalidad de Banda del Río Salí, en Tucumán. La legisladora calificó de “insólitas” las declaraciones oficiales y criticó la falta de transparencia en la administración municipal.
Omodeo consideró que la respuesta de Monteros, quien atribuyó la situación a gestiones anteriores, es una “excusa ridícula” ya que su familia ha dirigido el municipio por años. La diputada advirtió que el dinero desaparecido representa la falta de obras esenciales para los vecinos, como calles sin pavimentar, cloacas inconclusas y barrios sin servicios básicos.
Además, señaló que esta situación no es un caso aislado, sino parte de un patrón de gestión que, según ella, ha perjudicado a Tucumán durante décadas. “Saquean los recursos públicos, acumulan fortunas personales y condenan a los tucumanos a la precariedad”, afirmó.
Por su parte, el intendente Monteros negó las acusaciones en una conferencia de prensa. Aseguró que el municipio no ha recibido ninguna notificación formal sobre una investigación y rechazó la existencia de una compra de dólar MEP.
Según él, los fondos fueron utilizados en sueldos y obras, y sostuvo que se trata de una campaña en su contra en un año electoral. También vinculó las acusaciones con ataques dirigidos contra su padre, el ministro del Interior Daniel Monteros, y el gobernador Osvaldo Jaldo.
Hasta el momento, no hay información oficial sobre una investigación judicial en curso, pero el caso sigue generando repercusiones políticas en Tucumán.
