Los tres principales imputados por la desaparición de Daiana Garnica quedarán procesados en las próximas horas, de acuerdo al pedido realizado por el fiscal Claudio Bonari.
Los sospechosos son Darío Suárez, principal acusado debido al mensaje encontrado en el teléfono celular de la víctima, en el cual le pidió que se encontrara con él -y que no le dijera nada a los padres-algo que Suárez niega sistemáticamente.
Los otros imputados son Fabián “Sapo” Pacheco y Juan Mátar. El segundo es amigo y compañero de Suárez, y el tercero, el dueño de la ladrillera donde se realizan los rastrillajes para intentar saber qué pasó con la adolescente.
Daiana desapareció hace 16 días en Alderetes. Desde entonces, la Policía la busca intensamente. Una de las hipótesis es la posibilidad de que haya sido asesinada y que su cuerpo haya sido arrojado a los hornos de la cortada de ladrillos en la que trabajaba Suárez.
En las últimas horas, las pericias se concentraron en la búsqueda de cualquier indicio del paradero de la joven a través de un exhaustivo rastrillaje con perros especialmente entrenados para detectar restos de personas que se encuentren fallecidas y desaparecidas. Se trata de los animales que los especialistas utilizaron en el caso de Araceli Funes, la joven cuyo cadáver fue hallada por estos perros.
Además, el Equipo de Antropología Forense participa de los rastrillajes en la cortada de ladrillos.
La situación procesal de los tres detenidos será definida por el juez de Instrucción, quien debe decidir si les dicta la prisión preventiva solicitada por el fiscal o si los deja en libertad mientras continúa el proceso.