PAMI sufrió un ciberataque la semana pasada. A pesar de que se informó que la información se mantuvo segura, los afiliados experimentaron dificultades temporales.
En respuesta a esta situación, tanto en la provincia de Tucumán como en todo el país, se empleó una medida legal llamada “Resolución” para implementar rápidamente cambios y garantizar que la atención a los adultos mayores no se retrasara.
Para afrontar los problemas generados por el hackeo, se tuvo que regresar al uso de recetas médicas en papel. Esto significa que los médicos anotan manualmente los medicamentos que deben proporcionar a los afiliados, así como también las consultas médicas más complejas.
El encargado del PAMI en Tucumán, César Dip, detalló que los proveedores, especialmente las farmacias, informarán sobre los insumos entregados y luego el PAMI reembolsará el 100% de los costos.
En términos generales, las quejas sobre la atención en las farmacias han sido mínimas, excepto algunos casos aislados en los que los jubilados deben presentar documentos, tarjetas de afiliación y las nuevas recetas en papel para recibir lo que necesitan.
Debido a que el sistema está centralizado en Buenos Aires, las filiales en otras partes del país recibieron instrucciones de no encender sus computadoras para evitar demoras en el trabajo realizado por los expertos.
Aunque no se tiene información precisa sobre cuándo se solucionará el problema en el sistema, Dip afirmó que los proveedores ya han ajustado su forma de trabajar para reducir al mínimo las molestias a los afiliados.
