Como resultado de meses de investigación para esclarecer el robo de una camioneta ocurrido a principios de marzo de este año, efectivos de la División Sustracción de Automotores allanaron este martes una agencia de venta de autos usados, ubicada en calle México al 500 de la Capital y lograron no tan solo recuperar el vehículo sustraído, sino además secuestrar otro rodado que también había sido robado. Además incautaron un celular y documentación.
El 4 de marzo de este año, un hombre realizó una denuncia por el robo de un vehículo que había comprado en una agencia de autos. “La víctima venía pagando las cuotas y ya tenía un adelanto cancelado. Sin embargo, se retrasó en uno de los pagos y desde la sucursal lo llamaron para tratar de solucionar el problema. Fue en ese momento que, al acercarse hasta la agencia, dejó estacionada su camioneta en la intersección de calle Junín y Colombia. Cuando salió de la sucursal en busca de su vehículo, se dio cuenta de que no estaba”, explicó el jefe de la División, Comisario Principal Adrián Hisa.
Tras la denuncia, un equipo de esta Unidad Especial abrió una investigación que derivó en una serie de averiguaciones y vigilancias para esclarecer los hechos. A raíz de esto, se pudo advertir que el vehículo robado había sido violentado y sustraído por empleados de la misma agencia, el mismo día en que la víctima concurrió a sus oficinas. De acuerdo a su denuncia, el dueño del vehículo fue amenazado y obligado a decir dónde había dejado estacionada su camioneta marca Renault.
La causa está en manos del fiscal Pedro Gallo, de la Fiscalía de Robo y Hurto II, quien solicitó a la jueza penal Fanny Siriani, del Colegio de Jueces del Centro Judicial Capital, que se realicen allanamientos en distintas ubicaciones de la Capital.
Los efectivos allanaron este martes la agencia de venta de autos usados y lograron encontrar en el depósito la camioneta de la víctima y otra marca Ford que ya tenía pedido de secuestro por un hecho similar ocurrido en agosto pasado. Además, incautaron un teléfono celular y documentación. Los elementos quedaron secuestrados a disposición de la Justicia, mientras se continúa con la investigación.
Las medidas judiciales fueron supervisadas por el director General de Investigaciones, Comisario Inspector Jorge Dib, y el director de Investigaciones Capital, Comisario Principal Ernesto Soria.