El gobernador Osvaldo Jaldo se reunió esta mañana con el ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, y la plana mayor de la Policía de Tucumán para abordar la crisis carcelaria en la provincia. Durante la reunión, se destacó el traslado de 264 presos desde comisarías a un nuevo pabellón de la Unidad Penitenciaria de Villa Urquiza, que fue habilitado recientemente.
Agüero Gamboa explicó que el gobierno identificó el problema de hacinamiento en las comisarías y está ejecutando una solución, comenzando con el traslado de jóvenes de 18 a 21 años a la nueva unidad. Hasta ahora, 84 detenidos de la comisaría Décima han sido trasladados tras incidentes que incluyeron la quema de colchones.
Además, el ministro informó que entre finales de noviembre y principios de diciembre se prevé el traslado de más de 1.000 presos a los nuevos pabellones de Benjamín Paz y la Alcaidía de Delfín Gallo. Este traslado incluirá a mujeres privadas de libertad y a aquellas que utilizan pulseras electrónicas. Agüero Gamboa aseguró que se está realizando un análisis detallado de cada caso en colaboración con jueces y el presidente de la Corte Suprema de Justicia.
