El fiscal general ante la Cámara del Crimen, Germán Moldes, cuestionó esta mañana a su homólogo ante Casación Penal, Javier De Luca, por la decisión de cerrar la acusación que había realizado antes de morir Alberto Nisman contra Cristina KIchner, y otros funcionarios y dirigentes políticos, por presunto encubrimiento a los iraníes acusados de volar la AMIA.
“Hace tres semanas advertí que había maniobras dilatorias, maniobras para retardar el trámite en la Cámara Federal para dar tiempo a que entrara en turno este fiscal (De Luca) porque ya estaba decretado que este iba a poner lápida, este era el enterrador”, de la denuncia de Nisman, manifestó Moldes en diálogo con Radio Mitre.
Según Moldes, “Justicia Legítima es un colectivo absolutamente encuadrado en un solo objetivo, por ahora: obtener impunidad para los funcionarios acusados de casos de corrupción”.
Asimismo, el fiscal federal calificó de “chantada” el dictamen que desestimó avanzar en la acusación por encubrimiento, y advirtió que se sabía “de antemano” la decisión del fiscal De Luca. “Estaba ciento por ciento seguro de que esto iba a suceder, no tenía ninguna duda. No había más que mirar cómo funciona este colectivo que disparatadamente lleva el nombre de Justicia Legítima”, lanzó, en alusión a la agrupación cercana al Gobierno a la que pertenece De Luca.
Moldes, quien fue el que apeló para que la causa llegara a Casación, alertó que “la sincronización de tiempos para que interviniera este fiscal no fue coincidencia ni casualidad”, y apuntó duramente contra la Casa Rosada: “Esta es la Justicia que se nos quiere dejar, pero yo no quiero formar parte de ella”.
Ayer, el fiscal kirchnerista De Luca entendió que los hechos que figuran en la denuncia no pueden configurar un delito y se pronunció por desecharla. La decisión del integrante de Justicia Legítima provocó la reacción inmediata de todo el arco político opositor, desde donde la diputada Elisa Carrió lo acusó de “cómplice de asesinato y de encubrimiento”.
Fuente: Infobae