Ocurrio en Mendoza. Los hermanos Kevin y Franco Alvarez fueron asesinados con un balazo en la cabeza por una deuda de 14 mil pesos que les debían su patrón y una planta de marihuana. Ambos tenian como oficio ser albañiles.
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El crimen conmocionó a la provincia de Mendoza y dejó al descubierto un hecho con tintes mafiosos por el que hay cuatro detenidos.
Según el Diario Uno, la autopsia reveló que las víctimas recibieron un disparo en la cabeza de un revólver calibre 22. Antes de ser ejecutados recibieron una paliza brutal.
Los cuerpos fueron finalmente descartados en un desagüe cloacal en la zona de Rodeo del Medio, en Guaymallén. Fueron hallados el 28 de junio por una familia que circulaba por la zona con su camioneta y advirtió una zapatilla blanca y lo que parecía ser un cadáver.
Al llegar la policía, se constató que había dos cuerpos. Los análisis posteriores de ADN confirmaron que se trataba de los hermanos Álvarez, desaparecidos desde el 1 de junio cuando salieron de su casa en Maipú para cobrar una deuda de 14 mil pesos por un trabajo de albañilería.
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Qué sospechan los investigadores
En la causa hay cuatro detenidos imputados por doble homicidio calificado por alevosía en concurso premeditado de dos o más personas y por homicidio agravado por el uso de arma de fuego.
Uno de los detenidos es Fabián Dagostino, el patrón de los hermanos al que intentaron cobrarle una supuesta deuda de 14 mil pesos por un trabajo de albañilería. También se detuvo a su hijo, Axel.
Los otros dos detenidos son los hermanos Omar y Luis Andrada, albañiles como ellos.
Los investigadores comenzaron a seguir la pista de la deuda tras el testimonio de su madre. Además, se toparon con algunos insultos cruzados y amenazas lanzadas a través de WhatsApp con los cuatro detenidos.
A partir de esos datos se realizaron los allanamientos. Las discusiones con Fabián y Axel Dagostino fueron por plata. Los hermanos insistían en que les pagaran la deuda.
Doble crimen
En tanto, ambos mantenían una disputa con los otros dos albañiles, con los que al parecer habían compartido trabajos.
Los hermanos Andrada, según el periódico, tenían problemas con Franco, el mayor de los hermanos asesinados, por una planta de marihuana.
Según sospechan los investigadores, el joven le habría robado la planta de cannabis a uno de ellos y la habría vendido a una tercera persona. Los Andrada, por ello, habían prometido que tomarían venganza.
