Los propietarios de un centro médico que funciona en Alderetes ya no saben que hacer. Han sido asaltados en ocho ocasiones desde los fines de de enero. El médico Ismael Kamel y su mujer, Ana saben que pasaron a ser el blanco de los delincuentes que ingresan al lugar por lo general los fines de semana. De hecho, mientras se hacía esta nota, ambos se enteraron que la noche anterior, el lugar había sido otra vez violentado por extraños que rompieron puertas y parte del mobiliario. Las víctimas creen que los delincuentes buscan psicofármacos.
Este es el motivo por el que, algunos de los médicos, (entre ellos el propio hijo del matrimonio) han decidido dejar de atender en el lugar, por miedo a la inseguridad. Aquí la nota al profesional: