Las pericias a los teléfonos del Padre Juan Viroche que fue encontrado sin vida colgando de una linga en la Parroquia Ntra. Señora del Valle en La Florida el miércoles 5 de Octubre, arrojaron como resultado que el sacerdote recibió mensajes con amenazas. “Con estas pericias vamos a ahondar la línea de investigación sin descartar ninguna posibilidad”, explicó el fiscal Diego López Avila.
Las hipótesis apuntan a que el religioso pudiera haber sido amenazado por sus proclamas en sus homilías contra el narcomenudeo o la posilibilidad de una denuncia por prostitución infantil en la zona. En la fiscalía tampoco desechan que la mismas pudieran estar vinculadas con la vida íntima del sacerdote vinculado al menos con tres mujeres diferentes cuyas relaciones salieron a la luz luego de los “escraches” que se hicieron en las redes sociales al respecto.
Ayer por la mañana el Fiscal Diego López Ávila, se reunió con el Gustavo Vera de la Fundación Alameda y el abogado Mario Baudry, durante el encuentro discutieron sobre algunas pruebas y la tarea investigativa que lleva a cabo la fiscalía, para determinar cómo fueron los últimos minutos de vida del sacerdote. Pese a que al inicio ambos se presentaban como enviados del Papa, después aclararon que “no lo hacían en representación del Vaticano sino como enviados de Jorge Bergoglio”. Según él mismo explicó, Baudry se encargaría de “asesorar a la querella”.
Las primeras pericias realizadas a los teléfonos encontrados en la parte de atrás de la Iglesia, advierten docenas de mensajes con amenazas al sacerdote, con un fuerte contenido violento.
Por otro lado, se espera que en las próximas horas el Fiscal López Ávila complete su staff de expertos, entre los que se encuentran peritos de Gendarmería, Policía Federal y a Raúl Torre, como un especialista en criminología. Una vez que todos estén en Tucumán se volverán a hacer trabajos investigativos en la escena del crimen, que estarían previstas para esta semana.
Una teoría
Por la noche, Vera y Baudry participaron de la procesión organizada por Catequistas y Profesores de Religión de la provincia que se realizó alrededor de la Plaza Independencia. En este marco, Vera tomó contacto con la prensa y aseguró que “estamos convencidos de que es un asesinato, estamos colaborando con la querella y tenemos más información para aportar a la causa”, por otro lado reafirmó su teoría de que no tiene la menor duda de que “se trata de un crimen mafioso que no lo cometió un perejil, que quien los cometiera tenía algún nivel de profesionalidad”, aseguró el legislador porteño de Bien Común.
Para Vera hay elementos concretos para investigar el homicidio del Padre Juan y no un suicidio. “El fiscal está viendo hay elementos que se inclinan más hacia el homicidio que al suicidio, eso deducimos de los que está dentro de la causa sobre todo del material de la escena del crimen”.
El referente de la Alameda afirma que hubo una riña en el ingreso la Iglesia, donde el Padre Juan Viroche perdió sus anteojos lo que lo habría incapacitado a subir en la oscuridad de la madrugada al padre a darle fin a su vida. “Nunca vi a un horcado que sangre… el nivel de sangre. Yo creo que son contundentes las pruebas que hay adentro”, señaló. “Evidentemente hay un pez gordo dando vuelta”, indicó. “Pensamos claramente que fue un crimen y un mensaje mafioso, cosas que Juan denunciaba: trata infantil, chicas que drogaban para abastecer ruta de camioneros, fíjense a quien pertenece la flota de camiones, a quien denunciaba, quien está más arriba. Quien presenció la escena del delito, porque es un clásico siempre vuelve al lugar del crimen”, apuntó Vera un hombre muy cercano al Papa Francisco.