La Universidad San Pablo-T dio inicio a un nuevo ciclo lectivo en el año de su décimo aniversario. En un acto realizado en el aula magna de la institución, ubicada en la localidad de San Pablo, la presidenta de la Fundación para el Desarrollo, Catalina Lonac, encabezó junto al rector, Horacio Deza, la ceremonia de apertura del período.
Lonac, fundadora de la Universidad, resaltó ante una audiencia colmada de alumnos e invitados especiales, los altos parámetros de educación que caracterizan a la casa de estudios y el acompañamiento personalizado de los estudiantes hasta la graduación. “Esta universidad no abandona a sus alumnos, ni a los que están cursando ni a los que se reciben”, remarcó.
Deza, en tanto, subrayó el compromiso de la institución con el seguimiento de los egresados. “Con actualizaciones de sus conocimientos y una activa oferta de desarrollo profesional el acompañamiento es permanente y serán nuestros egresados quienes retomen la labor que hoy realizamos nosotros”, destacó el rector. Durante la ceremonia, se realizó el traspaso de la Bandera a los nuevos abanderados y escoltas. Además, el banco Santander Río entregó un premio de $ 10.000 al alumno que logró el mejor promedio del año 2016: Hugo Daniel Sánchez, de la carrera de Diseño Industrial.
Del acto también participaron el vicerrector, Ramiro Albarracín, la secretaria académica, Adriana Pastoriza, y los directores de los institutos que integran la Universidad: Salud y Calidad de Vida, Marta Valverde; Diseño, Estrategia y Creatividad, Matías Röhmers y Estudios Sociales, Polpitica y Cultura, Inés Yamúss. Entre los invitados especiales estuvieron el secretario General de la Gobernación, Pablo Yedlin; la subsecretaria de Representación y Coordinación Ejecutiva, Lorena Cuba; el tesorero de la Fundación para el Desarrollo, Jorge Rocchia Ferro y la secretaria de esa institución, Catalina Rocchia Ferro.
Diez años de crecimiento
Catalina Lonac rememoró los inicios de la Universidad cuando, en 2007, el proyecto de creación de la institución fue aprobado. Más adelante, el ingreso de los estudiantes, la apertura de las carreras y, finalmente, la graduación de los primeros profesionales. “Los recuerdo con muchísimo cariño, con el nombre y apellido de cada uno. En ese momento, pensé que había llegado el momento en que la sociedad nos juzgue. Gracias a Dios, esos egresados tienen trabajo”, remarcó.
Tras un 2016 que estuvo signado por la creación de la reserva en Villa Nougués y la realización del Concurso Internacional de Piano, el 2017 presenta nuevos desafíos para la casa de estudios. En su agenda ya figura un ciclo mensual de charlas que comenzará el 27 de abril con la disertación del reconocido economista Guillermo Nielsen. En junio, la Orquesta Filarmónica de Zagreb (Croacia) dará un concierto en el teatro San Martín, en un esfuerzo conjunto entre el Ente Cultural de Tucumán, la USP-T y la embajada de Croacia.
“Acabamos de inaugurar el laboratorio de habilidades clínicas, un edificio de más de $ 10 millones, que representa un enorme esfuerzo de la universidad”, indicó. Lonac resaltó la implementación de un sistema de “simuladores” para el estudio del cuerpo humano y sus enfermedades: una suerte de modelos que no sólo representan al cuerpo humano sino que pueden ser cargados con un software que reproduce síntomas de enfermedades. “Es lo que pide la Comisión Nacional de Evaluación Universitaria para todas las carreras de Medicina. Son muy pocas las que cumplen, San Pablo – T es una de ellas”, destacó Lonac.
Los “simuladores” son modelos de cuerpos humanos que reproducen los diferentes órganos y que, mediante un software, pueden desarrollar síntomas de enfermedades que deberán ser detectadas, diagnosticadas y tratadas por los estudiantes.
La directora del Instituto de Salud y Calidad de Vida de la USP – T, Marta Valverde, remarcó la importancia de esta incorporación a la metodología de enseñanza de la carrera que ella dirige. “Nuestros alumnos van a aprender en simuladores primero las maniobras de la destreza clínica. Luego, recién van a poder acercarse a los pacientes reales”. La idea, remarcó la profesional, es que los estudiantes lleguen al primer contacto con los pacientes atesorando conocimientos sólidos y prácticas en simuladores.
Estas prácticas se realizarán en el nuevo edificio construido para el funcionamiento del Laboratorio de Habilidades Clínicas Néstor Forenza, que albergará a los estudiantes avanzados de medicina. Se espera que los primeros médicos egresen a finales del año 2019.