A 48 horas de un hecho ocurrido en una panadería, ubicada en Crisóstomo Álvarez al 300, el Ministerio Público Fiscal, a través de la Unidad Especializada de Robos y Hurtos II, imputó a un individuo por el delito de robo simple en calidad de autor. En la audiencia, desarrollada este miércoles, el auxiliar de fiscal, Rodrigo Bilbao, por delegaciones del titular, Pedro Gallo, se refirió al hecho producido el lunes, a las 04:10 horas, que fue captado por las cámaras de seguridad del comercio, donde se ve como el acusado rompió el vidrio (de uno de los laterales) con un elemento contundente, entró y se desplazó por el interior para tomar de la caja registradora la suma de $2.600, para luego huir.
Como elementos probatorios, además de los tres videos aportados por la propietaria, se refirió a la prenda secuestrada (remera negra y bermuda de color rosa) y el acta de inspección ocular realizada por la Comisaría I, donde se constató la rotura del vidrio dañado (de 40 cm de alto x 30 de ancho en el costado de la puerta de ingreso).
Entre los riegos procesales, el representante del MPF se refirió al peligro de fuga por falta de arraigo (el sospechoso dijo estar en situación de calle). Asimismo, Bilbao informó que el sujeto posee una condena anterior, dictada el 14 de septiembre de 2021, por el delito de robo simple en grado de tentativa, donde se le dictó la pena de tres meses de cumplimiento efectivo. Seguidamente, el Auxiliar de Fiscal pidió las medidas de coerción de máxima intensidad (prisión preventiva) por dos meses para concluir con las medidas que restan (ampliación declaratoria y examen antropométrico), que fueran validados, parcialmente, por la jueza actuante por el término de 30 días. Posteriormente, la magistrada ordenó el traslado del imputado al servicio penitenciario provincial.
