En apenas cinco meses, el mortal suceso fue completamente esclarecido y el acusado condenado, gracias al trabajo conjunto entre la Fiscalía y el ECIF del Ministerio Fiscal. Fueron clave los resultados de las pericias tomadas a las huellas del automóvil encontradas en el lugar.
Ramón Rosa Díaz, acusado de asesinar a su ex esposa, Ana María Carrizo, en Los Bulacio, Cruz Alta, fue condenado, en un juicio abreviado celebrado este jueves 24 de febrero, a una pena de 10 años de prisión de cumplimiento efectivo, por el delito de homicidio preterintencional agravado.
El caso fue investigado por el fiscal Carlos Sale, a cargo de la Unidad Fiscal de Homicidios II. El auxiliar de fiscal Juan Pablo Godoy expresó los términos del acuerdo al que arribó el MPF con la defensa del acusado y en conformidad con la familia de la víctima, el que fue homologado por el juez interviniente.
El hecho
De acuerdo a la teoría del caso, en la noche del 2 de setiembre del año pasado, entre las 22:30 y las 23:00 horas, Ana María regresó a su domicilio, ubicado en la ruta provincial 306, kilómetro 18, en Los Bulacio, Cruz Alta, donde a pesar de haber terminado la relación, todavía convivía con su ex pareja, a la espera de la venta de esa propiedad.
En ese contexto, Díaz mantuvo una fuerte discusión con la mujer, a quién empujó contra la pared del inmueble, provocando un traumatismo cerrado de cráneo leve, luego de lo cual la víctima sufrió un ACV que le provoca la muerte.
Después de la agresión, Díaz tomo el cuerpo, lo cargó en su automóvil modelo Renault 9, y lo llevó hasta un cañaveral ubicado a 1 kilómetro y medio, donde lo arrojó a la vera de un canal de desagüe, donde fue hallado el 6 de setiembre.
Las pericias practicadas por el personal de Criminalística del ECIF en la escena permitieron determinar que las huellas de vehículo encontradas en el lugar del hallazgo del cuerpo eran coincidentes con las del auto Renault 9 de Díaz.
En tanto, la autopsia determinó que Díaz dirigió su accionar a empujarla, no a matarla. En ese sentido, el informe autópsico refleja que la víctima sufrió un TEC leve y luego un ACV.