La Confederación General del Trabajo (CGT) confirmó que realizará un paro general el miércoles 10 de abril en todo el país, en rechazo a las políticas económicas del gobierno de Javier Milei y ante la falta de diálogo con la Casa Rosada. La medida de fuerza será sin movilización, pero contará con el apoyo de los gremios del transporte, lo que significa que no habrá colectivos, trenes ni subtes durante toda la jornada.
El Consejo Directivo de la CGT tomó la decisión luego de expresar su preocupación por la situación económica y las dificultades en las negociaciones salariales. Según Héctor Daer, uno de los secretarios generales de la central obrera, el paro busca interpelar las decisiones del gobierno, ya que no se han discutido “los temas de fondo” con los trabajadores. Además, denunció que el gobierno presiona a las cámaras empresariales para limitar los aumentos salariales, lo que ha generado salarios a la baja.
Otro de los puntos que llevó a la CGT a tomar esta medida es el congelamiento del bono para jubilados y el impacto de la política económica en la industria y el empleo. “Quieren precios libres y salarios controlados”, afirmó Daer, criticando el plan de Milei para bajar la inflación a costa del poder adquisitivo de los trabajadores.
El gobierno, por su parte, intentó frenar la medida mediante negociaciones encabezadas por Guillermo Francos, uno de los funcionarios que mantiene contacto con los sindicatos. Sin embargo, en la Casa Rosada creen que el paro es una estrategia de la CGT para mostrar fuerza frente a las medidas de ajuste. Aun así, un funcionario cercano al presidente no descartó la posibilidad de convocar a una mesa de diálogo con sectores sindicales dispuestos a negociar, incluso incluyendo a Pablo y Hugo Moyano.
