Ponían un aviso. Un precio generoso. Era el anzuelo: así los miembros del grupo delictivo que fue desbaratado esta madrugada durante más de cuarenta allanamientos en toda la provincia engañaba a incautos. Ofrecían vehículos a precios irreales-a casi el 50 % del valor promedio en el mercado-y con facilidades de “financiación” que atraían la atención de muchos desesperados. Pero había una particularidad extra: los miembros del grupo-que pertenecen a la comunidad gitana en su mayoría y que contarían con antecedentes-utilizaban las redes sociales como el principal canal de divulgación de “sus ofertas”.
Ese era el principal modus operandi denunciado por los más de 60 damnificados que denunciaron este tipo de maniobras en la compra de vehículos. Algunos residen en las provincias de Salta, San Luis, Corrientes, Chaco, Santa Fe y Buenos Aires. Todos fueron engañados con una publicaciones a través de diferentes redes sociales en las que los estafadores ofrecían a la venta un vehículo a un precio inferior al real y con facilidades de financiación. También recibían otros vehículos y dinero a cambio de los mismos. En un momento de “crisis” donde el mercado negro empieza a moverse en todos los rubros, fueron muchos los que se arriesgaron confiando en que hacían “un muy buen negocio” en un momento tan difícil.
Para poder perpetrar de manera sistemática este tipo de estafas el grupo se valía de estos trucos y también procuraban tener cierto paraguas legal. Es lo que los investigadores están procurando determinar a través de la vinculación de los abogados G.A.S y C.A.A., dos reconocidos letrados quienes quedaron por ahora vinculados con la imputación.