Ni bien se terminó se rubricar el “Acuerdo por el Tucumán del Bicentenario”, entre José Cano y Domingo Amaya, comenzó a ser analizada ésta unión entre representantes del Acuerdo Cívico y Social con los de una parte del Frente para la Victoria. “Las alianzas tienen dos momentos, completamente distintos, el momento electoral; etapa en la que es positiva. Porque éste caso se suma votos. Mientras que la otra etapa es la del ejercicio del poder, donde las perspectivas son negativas; porque se torna difícil mantener los consensos y acuerdos básicos. La oposición cobra un nuevo brío, porque es todo una novedad encontrar un peronísmo disidente del propio Frente para la Victoria”, explicó Juan Pablo Lichtmajer, Licenciado en Historia y Doctor en Ciencias Políticas, en dialogo con Radio Nacional Tucumán.
La coherencia, en la política, es un valor importante; por lo que también no podría ser obviada en su relato. “Le va permitir, al oficialismo, transformarse en la línea con mayor coherencia. En las decisiones que se tomaron en el marco del Frente para la Victoria, en Tucumán, faltó humildad. Hubiera sido mejor que el mensaje sobre el baño de humildad hubiera llegado unos meses antes, para que en Tucumán lo escuchen claramente”, agregó.
Por último, se refirió a lo que podría suceder en caso de que la alianza logre la victoria en las próximas elecciones provincias y cómo podría afectar al Proyecto Nacional y Popular. “Si ésa oposición gana las elecciones, Tucumán será proyectado como el ejemplo a seguir. De ésta manera tendrá una influencia en el escenario nacional”, concluyó Lichtmajer.
Foto: José Inesta.