“Peque” Pérez, uno de los principales implicados en el aberrante crimen de Priscila Paz, se fugó nada menos que de la comisaría seccional primera, ubicada en pleno centro, donde permanecía en calidad de detenido en los últimos meses.
Según se pudo saber, el sospechoso se encontraba en la dependencia de San Martín al 200 detenido y procesado por el caso que conmovió a todo un país y la noticia de su fuga dejó atónitos a todos en la fiscalía donde se tramita el caso de Paz. La primera investigación apunta a determinar fehacientemente si existen policías implicados en el increíble episodio del escape.
La desaparición de Priscila dejó a su familia preocupada, cuando hace tres meses no se supo nada de ella luego de que saliera de su trabajo y no regresara a su casa en San Pablo. Días después, el cadáver de la joven, casi desfigurada, apareció en un cañaveral, a metros del camino vecinal donde está ubicada su casa. La joven estuvo privada de su libertad en un lugar donde habría sido torturada antes de ser asesinada. Los implicados, conformarían una banda delictiva vinculada con la distribución de sustancias en la zona. La familia y los representantes legales de la familia quedaron sorprendidos ante la noticia: “Lamentamos enterarnos de esta manera. Se debieron haber tomado recaudos”, explicó Javier Lobo Aragón, quien representa a la familia Paz.
En la Fiscalía de María del Carmen Reuter por eso solicitaron una minuciosa investigación que apunta a los empleados policiales que estuvieron de guardia en el momento de la fuga del sospechoso. La comisaría Primera está ubicada en pleno centro de la ciudad en una zona de alta actividad y se presume por ello que se trata de una dependencia que cuenta con alto grado de seguridad. Todo eso quedó desbaratado ante la maniobra de fuga del implicado que amenaza con devenir en un nuevo potencial escándalo.