Un efectivo de la Dirección de Guardia Urbana le salvo al vida a un niño de tres años en Plaza Independencia.
Carlos Mirk, quien forma parte del equipo de ciclopolicías que recorren la ciudad, le practicó los primeros auxilios a un pequeño que se estaba asfixiando al ahogarse con un chupetín.
Este medio día el agente se encontraba cubriendo un corte de tránsito y observó a un grupo de personas congregarse alrededor de un menor, al acercarse vio que éste se ahogaba con un caramelo. Sin dudar, le practicó una opresión sobre el estómago y logró que lo arrojara. Luego el niño fue trasladado por precaución al hospital, acompañado por el personal del 107.
La llamada maniobra de Heimlich fue el procedimiento utilizado por el policía. Ésta es una operación de primeros auxilios para desobstruir el conducto respiratorio cuando se encuentra bloqueado por alimentos o cualquier otro objeto.
Actualmente al rededor de 400 policías de Guardia Urbana recorren a pie, en bicicletas y en moto, el radio de las cuatro avenidas de la Capital.