El golpe tuvo cierto suspenso pero el resultado esperado llegó promediando la jornada. Germán Alfaro consiguió la reelección de la intendencia, un distrito clave en el armado político de la provincia, sobre todo a la hora de analizar la proyección nacional.
“Porque vos sos importante, Germán Alfaro intendente nuevamente”, fue el jingle escuchado con la música de Damas Gratis coreado en la noche del domingo en el marco festivo que tuvo un cancionero popular variado.
La elección por el distrito capital tuvo un rival que jugó fuerte desde el oficialismo provincial: los números de Mario Leito sorprendieron pero al final de la jornada, eso sólo significará una anécdota. Durante la tarde, los referentes del alfarismo habían tomado con cierta prudencia las palabras de Leito emitidas, como un golpe de efecto, desde el Salón Blanco de la Casa de Gobierno, en una primera aparición junto a la formula ganadora provincial.
Tuvo que pasar un tiempo más para que los números de Alfaro empezaran a despegarse y mostrar lo que sucedería indefectiblemente. Hasta que llegó ese instante, la prudencia estuvo presente en la sede de Alfaro.
“Les pido que nos acompañen un ratito más. Los números que tenemos son auspiciosos, pero queremos confirmarlos en un rato. Aguanten”.
El festejo fue conmovedor y concentrado en el ámbito familiar, con Beatriz Avila y los hijos fundidos en un abrazo.
Alfaro llegó justo en el pico de la efusividad de los festejos antes de pronunciarse: “¡Me siento honrado porque los vecinos nuevamente me han reelegido como su intendente!”.
El cierre llegó con un emotivo discurso que ponía fin a una larga campaña que tuvo idas y vueltas. “Gracias a ustedes por acompañarnos cuatro años más. Para esto es la función pública. Si tengo que derramar hasta la última gota de sangre por los vecinos de San Miguel de Tucumán, lo haré. Cuando hay convicción, nadie se arrodilla”