Un funeral violento alteró a los vecinos de Yerba Buena. Esta vez policías motorizados tuvieron que custodiar la caravana que acompañaba el cortejo fúnebre, en calidad preventiva.
La caravana de alrededor de 50 motocicletas se movilizó por barrio sur de la capital, pasó por el estadio del club San Martín y continuó hasta el Cementerio de la Paz, en Yerba Buena. Durante la caravana, algunos de los jóvenes que acompañaban al difunto (se desconoce su identidad) realizaron disparos al aire.
En los últimos días, el fiscal Washington Navarro Dávila avanzó en causas relacionadas con funerales “tumberos”. A partir de 22 allanamientos, cuatro personas fueron detenidas y se secuestraron más de 40 celulares, un arma y varias cajas con cartuchos, entre otros objetos.