A partir de mañana, la municipalidad de San Miguel de Tucumán implementará una nueva medida que prohibirá el estacionamiento durante las 24 horas en la calle Las Piedras, desde calle Jujuy hasta la avenida Sáenz Peña, lo que ha generado preocupación entre vecinos y comerciantes de la zona.
Esta medida forma parte del Plan Integral de Movilidad Urbana (PIMU) y también afectará a las calles Crisóstomo Álvarez y San Lorenzo, que recientemente han cambiado de dirección. La medida ha generado malestar, especialmente entre los residentes y comerciantes que llevan años estacionando sus vehículos en esta calle y ahora se ven obligados a buscar nuevas alternativas.
Los comerciantes de la zona expresaron su inquietud, como Jorge Atar, propietario de una pollería en Las Piedras al 200, quien señaló que la prohibición le complicará la situación, aunque aún no ha decidido qué hacer. Otros, como Ignacio Páez, ya han encontrado soluciones buscando cocheras para evitar problemas. Por su parte, Romina Rojas, dueña de una librería en Las Piedras al 400, ve con buenos ojos la posibilidad de que aumente el movimiento peatonal, lo que podría mejorar la seguridad en la zona.
Los padres de alumnos de las instituciones educativas situadas en la calle Las Piedras, como el colegio Jesús Sembrador, la Fundación de Ayuda al Niño Necesitado y el Instituto John Kennedy, también se han mostrado preocupados. La prohibición de estacionar dificultará la llegada y salida de los estudiantes, lo que ha generado críticas hacia la municipalidad.
Mientras tanto, la Dirección de Alumbrado y Semáforos del municipio continúa ajustando los semáforos en las calles afectadas por el cambio de dirección. Los semáforos de Crisóstomo Álvarez y San Lorenzo destellarán en amarillo durante un período de adaptación para que los conductores se acostumbren a la nueva disposición.
La medida, que pretende mejorar la movilidad en la ciudad, ha generado polémica y preocupación entre los afectados, quienes buscan soluciones mientras esperan ver cómo se desarrollan los cambios.
Fuente: La Gaceta