Mientras todo el país estaba concentrado en las elecciones legislativas de este domingo, una familia recibía la peor de las noticias después de que fuera hallado sin vida el cuerpo de un joven de 21 años en una alcantarilla.
El hecho ocurrió en la Ruta 9 entre El Cadillal y la Capital. El muchacho, identificado como Alberto Nicolás Mazuco habría perdido el control de la moto y cayó al costado de la ruta.
Personal policial e investigadores trabajó en el lugar manejando varias hipótesis acerca del hecho. La más fuertes es que se trataría de un accidente sin la intervención de otro vehículo. Además de encontrar la moto, también hallaron la billetera y el teléfono celular en el lugar.
Todo comenzó el sábado cuando, en pocas horas, la red social Facebook se inundó de pedidos de información sobre el joven. La noche anterior había salido de trabajar en una estación de servicio de Los Nogales pero nunca llegó a su casa.
“Su pareja nos envió un mensaje para decirnos que no había aparecido. Nosotros creíamos que ya iba a llegar, jamás imaginamos que iba a aparecer así. Con el correr de las horas se hizo la denuncia y se empezó a buscarlo por los hospitales pero no estaba en ningún lado”, comentó Daniel Quipildor, uno de sus amigos.
El sábado a las 18 el muchacho tenía que volver a su trabajo y nunca se presentó. Esa noche había una reunión en su casa y lo esperaron en vano. El domingo, sus amigos dijeron basta y salieron a buscarlo. “Lo buscamos y lo encontramos nosotros en menos de 10 minutos. Si caía a la platabanda 15 metros antes, se salvaba”, lamentó Quipildor. “Tenía un chiquito de dos años. El nene decía que su papá ya iba a llegar”, contó su amigo.
El muchacho cayó en una de las partes más hondas del espacio ubicado entre las dos manos de la autopista y sufrió un fuerte golpe contra el cemento de una alcantarilla. El joven iba con sentido al sur, en una zona donde no hay guardarrail. Por la lluvia que se desató durante el sábado, no se pudieron encontrar las huellas de su rodado en la tierra. Según comentaron sus amigos, todavía estaba agarrado al manubrio de su moto cuando lo encontraron.
A partir del hallazgo del cuerpo, la Policía movilizó patrulleros de Los Pocitos y Tafí Viejo para acordonar el sitio y restringir el tránsito en la mano que va hacia la capital. El operativo incluyó a más de 30 policías para contener al pequeño grupo de familiares y amigos, y a la inmensa aglomeración de curiosos que frenaron sus automóviles para ver qué pasaba. La fiscalía de turno ordenó que la división Homicidios iniciara la investigación, pero se estima que no se habría tratado de un crimen.