Luis Miguel Rodríguez pasó por el quirófano este miércoles y se recupera favorablemente en un sanatorio privado de la capital tucumana, con la compañía de familiares y amigos. El ’Pulguita’ está internado desde el domingo pasado, cuando sufrió un accidente de tránsito y su pronóstico sigue siendo “reservado”.
Así lo explicó el parte médico que, por el pedido de su familia, brindó el Sanatorio del Norte de San Miguel de Tucumán después de la operación de cuatro horas a la que se lo sometió. “El paciente actualmente cursa el postoperatorio inmediato de una cirugía compleja maxilofacial”. El comunicado emitido por el sanatorio agrega: “Fue intervenido por un equipo multidisciplinario a cargo del servicio de cabeza y cuello de nuestra Institución. Se encuentra estable, lúcido, con monitoreo permanente del equipo médico y en compañía de sus familiares”, indicó.
Manuel Usandivaras, jefe del servicio de cabeza y cuello del Sanatorio del Norte y quien realizó la intervención, había explicado: “El golpe en el macizo facial (maxilar superior) generó una fractura que se llama fractura de Le Fort, que es de resolución quirúrgica. De igual manera esto no afectaría su desarrollo profesional; al ser un deportista de alto rendimiento, creemos que tendrá una buena recuperación”.
El siniestro del Pulga ocurrió cerca de la localidad de La Madrid, en Tucumán, en el cruce de las rutas 157 y 308, cuando el simoqueño volvía a su casa tras el partido en el que el “Ferroviario” derrotó a Instituto en Córdoba, por la Liga Profesional.
Durante las últimas horas, el Pulga recibió la visita de muchos ex compañeros y amigos, como por ejemplo: Ricardo Rodríguez (ex técnico de Atlético), César Montiglio y Guillermo Acosta. “Él no se acuerda de lo que pasó, pero lo vi muy bien. De buen ánimo”, remarcó ’Longo’, uno de los primeros en visitarlo ya en el sanatorio 9 de Julio.
Según explicaron desde el cuerpo médico, el futbolista podría volver a las canchas en menos de dos meses, todo teniendo en cuenta si la recuperación se lleva a cabo de la forma esperada. Por lo pronto, el crack simoqueño tendrá que descansar y reunir fuerzas.