En los últimos días se inició el juicio oral por el homicidio de Ana Dominé, las empresarias que fue ejecutada de un disparo durante un robo cometido en La Ciudadela, donde sustrajeron un bolso con $ 200 mil. En el proceso, más de 60 testigos prestarán declaración.
Entre los imputados, se encuentran Braian Zenón Leguizamón, Exequiel Antonio Tous, Federico Antonio Sánchez, Raúl Antonio Greco y Sebastián Alfredo Quiroga; Edgardo Ramón Visuara y Cristian Raúl Orlando Godoy, este último es sindicado como el autor responsable del crimen de acuerdo a las pruebas encontradas por los investigadores.
En la jornada del lunes, declararon los últimos testigos ofrecidos de las defensas y, si bien el material probatorio sería contundente contra algunos de los acusados, los defensores creen que tendrán “mucha tela para cortar” durante sus alegatos.
Los testigos de Godoy, el involucrado más complicado, son sus propios vecinos, quienes intentan ubicar al acusado en otro lugar distinto al de la escena del crimen. Fueron seis las personas que declararon que Raúl Orlando estuvo la noche del asesinato en casa de su cuñada, celebrando el cumpleaños de su sobrino de 4 años.
La familia política del imputado aseguraron que entre las 20 de ese día y las 0.30 del 13 de septiembre Godoy no se movió de allí y que lo trasladó su señora a bordo de una Honda Bliz blanca. A pesar de coincidir en esta declaración, estas personas no pudieron hacerlo de este modo cuando le consultaron sobre qué habían comido esa noche. Además, una prueba genética en un guante encontrado en la escena del crimen complica más la situación de este acusado.