La Defensoría del Pueblo de Santiago del Estero solicitó a las autoridades de Tucumán que refuercen los controles sobre los vertidos de efluentes en los ríos que alimentan la cuenca Salí-Dulce, debido a la presencia de “bloom de algas” o “verdín” en el Embalse de Río Hondo. Estas algas pueden causar problemas en la piel y las vías respiratorias, especialmente en personas con sensibilidad inmunológica, y su proliferación está relacionada con el aporte de nutrientes como fósforo y potasio provenientes de actividades productivas en Tucumán.
La Defensoría alertó que se detectó una franja verde en el agua cerca del murallón del Embalse y en partes de la costa, lo que generó preocupación entre los habitantes. Técnicos del Instituto de Hidrobiología tomaron muestras para analizarlas, confirmando que se trata de algas cianobacterias. Estos microorganismos se encuentran en aguas superficiales y tienden a multiplicarse en épocas de altas temperaturas debido a la combinación de calor y nutrientes.
Aunque los parámetros medidos hasta ahora no muestran problemas graves, como la falta de oxígeno en el agua o la muerte de peces, las autoridades advierten que, si no se controla la situación, el crecimiento de estas algas podría continuar y generar mayores impactos ambientales.
La Defensoría subrayó que se realizan gestiones con Tucumán para implementar controles más estrictos y proteger la cuenca, considerada un recurso vital tanto para el medio ambiente como para las personas. Además, recordó que desde 2011 Santiago del Estero ha trabajado en la reducción de la contaminación del embalse gracias a un acuerdo interprovincial firmado por el gobernador Gerardo Zamora. Este acuerdo dio lugar a un programa de Monitoreo Ambiental que supervisa la calidad del agua y controla contaminantes como cenizas, vinaza y el agua de lavado de caña.
Finalmente, el organismo destacó que la falta de políticas nacionales sobre producción sustentable, sumada a la decisión del presidente Javier Milei de eliminar obras públicas de saneamiento, podría agravar los problemas ambientales. Ante esta realidad, instan a reforzar las medidas para evitar la expansión de la contaminación en la cuenca Salí-Dulce.
Fuente: El Liberal