El empresario hallado descuartizado en una valija en Ingeniero Budge tenía deudas millonarias, varias de ellas de juego, por las que había recibido en su celular cerca de 200 mensajes amenazantes que son investigados por la Justicia para esclarecer el crimen.
Con el fin de dar con el o los asesinos de Fernando Pérez Algaba (41), apodado “Lechuga”, personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Lomas de Zamora se encuentra recabando testimonios de amigos, familiares y allegados de la víctima.
Según indicaron fuentes de la causa, el empresario “tenía más de 200 mensajes amenazantes en su celular de distintas personas”, por lo que buscan avanzar en las declaraciones, aunque muchos de los testigos no aportan datos por “temor”.
Pérez Algaba “era ludópata y hábil para los negocios”, afirmaron los investigadores a la agencia Télam, y que dicha adicción se acrecentó durante la pandemia del Covid-19, cuando la combinó con el trabajo de trader en el ambiente de las criptomonedas.
“Era inteligente, empezó de muy de abajo y empezó a ganar buena plata. Se cebó y como tenía amigos y conocidos de guita, comenzó a moverla en el circuito hasta que un día perdió y empezó deberle a mucha gente. No hay una cifra precisa, pero se habla de entre tres y diez millones de dólares. En su celular hay más de 200 mensajes de amenazas de distintas personas”, explicó el vocero.
Las hipótesis sobre el crimen del empresario hallado descuartizado
A raíz de ello, los investigadores barajan distintas hipótesis y todas ellas apuntan a un ajuste de cuentas por motivos económico.
“Una hipótesis es que lo mataron en Ituzaingó, en un lugar que aún no está establecido, y de allí lo transportaron en una valija hasta la zona de la feria La Salada, donde no hay cámaras de seguridad”, precisó un pesquisa.
En tanto, otra línea investigativa apunta a que Pérez Algaba se presentó en un barrio privado de la localidad de Ituzaingó para realizar un negocio inmobiliario que le iba a reportar un dinero “importante” y que desde allí desapareció.
Los investigadores se encuentran analizando una serie de posteos realizados por la víctima en redes sociales y mensajes que mantuvo con otras personas por WhatsApp, especialmente con un hombre que le reclamaba el pago de una deuda cercana a los 70 mil dólares.
Fernando Pérez Algaba fue hallado asesinado a balazos y descuartizado en el interior de una valija que se encontraba en el arroyo del Rey en la localidad de Ingeniero Budge, en el partido bonaerense de Lomas de Zamora.
Sus restos fueron encontrados el pasado domingo por unos niños que jugaban a la pelota en el lugar. Según se informó, los investigadores del caso primero detectaron antebrazos y piernas del hombre.
Una máquina que saca la basura de esas aguas permitió el hallazgo de un brazo completo y el relevamiento de las huellas dactilares permitió identificarlo en las últimas horas.