La expresidenta Cristina Kirchner lanzó un mensaje crítico contra Mauricio Macri, Javier Milei y el presidente de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, a través de sus redes sociales, en medio de tensiones políticas por declaraciones recientes sobre la Justicia y la relación entre el PRO y el gobierno de Milei. En su mensaje, Cristina calificó la situación como “mafia y delirio” y cuestionó las acciones y declaraciones de los tres líderes.
Cristina criticó a Mauricio Macri por pedirle a Milei “ser transparente” y “cuidar la República”, mientras que Milei continúa afirmando que su gobierno es “el mejor de la historia”. También apuntó contra Rosatti, quien había señalado que “todo termina en la Corte” en referencia a la posible designación por decreto de Ariel Lijo como juez del máximo tribunal.
La expresidenta expresó su preocupación por el rol de la Corte Suprema, destacando que las decisiones finales recaen en figuras que “no fueron votadas por nadie” y que tienen cargos vitalicios. En un tono irónico, dijo: “O sea… no importa lo que votás porque quien finalmente decide no fue votado por nadie”.
Por otro lado, Cristina utilizó su mensaje para llamar a la reflexión en vísperas de Navidad, pidiendo solidaridad, unidad y amor al prójimo: “Ratifiquemos nuestros valores de solidaridad y amor al prójimo en momentos de tanto desamor y de ‘sálvese quien pueda’. Feliz Navidad para todas y todos”.
Este mensaje llega tras declaraciones de Javier Milei sobre un posible acuerdo electoral con el PRO y la respuesta de Macri, quien aseguró estar a favor de trabajar juntos en base a “transparencia” y “cuidar la República”. Además, Cristina ya había criticado la relación entre Milei y Macri días atrás, acusando a ambos de protagonizar “golpes sucios” que contradicen los principios republicanos que dicen defender.
Finalmente, Cristina también rechazó la declaración de Rosatti sobre la posibilidad de que la Corte resuelva en última instancia la designación de Ariel Lijo. Según el juez, aún no se puede opinar sobre un hecho que no ha ocurrido, pero reconoció la presión política que vive el Poder Judicial en este contexto.
