Una disputa armada terminó con el sangriento saldo de dos muertos y dos heridos de bala luego de que dos familias se enfrentaran poco después del mediodía del domingo en circunstancias que estarían vinculadas con un reclamo vecinal. La sombra de la venta de sustancias en el lugar, sin embargo, atraviesa todo el drama en la zona donde se produjeron los homicidios.
La balacera se produjo a plena luz del día, en momentos en que los vecinos del barrio San Cristóbal celebraban, paradójicamente, el Día del Niño, y se produjera un enfrentamiento que terminaría siendo mortal para René Antonio Noriega, de 41 años y Hugo Horacio Daverio, de 39. La pelea se registró en pasaje Chubut al 2.400 y los pesquisas que concurrieron al lugar, quedaron sorprendidos al encontrar más de una decena de vainas servidas en el interior de la propiedad de Noriega. Lo otro que llamó la atención del equipo, encabezado por Jorge Dib, fue que el tiroteo tuviera lugar muy cerca del lugar en el que había niños.
Tanto Noriega como Daverio resultaron con heridas de bala que terminarían causándoles la muerte. La primera versión indica que una de las víctimas se enfrentó con dos jóvenes pidiéndole explicaciones por diferentes detonaciones que se produjeron durante la madrugada de ese domingo, a causa de una “fiesta” que tuvo lugar en una casa vecina. Sin embargo, Noriega no lo hizo de “forma amable”: de esa pelea resultó herido de bala Federico Sánchez, vinculado con los dueños de la casa donde había tenido lugar la fiesta.
Ese incidente fue la mecha encendida que detonó la balacera que tendría lugar a continuación, cuando otro hombre, identificado como Carlos Naranjo, acompañado por Daverio acudieron a la casa de Noriega armados. En el lugar, precisamente, donde los pesquisas encontraron la mayor cantidad de vainas servidas, se produjo el enfrentamiento armado. Noriega no huyó al enterarse que lo iban a buscar, todo lo contrario: los esperó armado mientras sacaba a su familia del lugar. Ya sabía lo que iba a tener lugar a continuación.
Casi parapetado, Noriega abrió fuego contra quienes se presentaron en la propiedad. Daverio recibió un tiro en el pecho y terminaría desmoronándose sobre la calle, mientras que Naranjo sería herido por una bala que le atravesó el pulmón, diafragma y el hígado. Por su parte, Sánchez (a) “El Loco Fede” terminó con una herida en el estómago.
Este último está sindicado de ser quien inició primero la disputa, luego de que hiciera varios disparos durante la noche del sábado. Este hecho, estaría vinculado, según los familiares de Noriega, con la actividad de los Naranjo en la venta de sustancias. Lo que pasó después habría sido producto del reclamo de Noriega por esta circunstancia.
En tanto, la investigación busca determinar si el narcomenudeo era la principal actividad que tenía una de las familias involucradas en la tragedia que terminó con dos muertes.