Un video que se viralizó en la redes sociales este jueves, conmueve al mostrar el momento en que Azucena Lobo, una madre desesperada, le pide al Presidente de la Corte Suprema de Justicia de la provincia, Antonio Gandur que haga justicia por su hijo que murió atropellado en diciembre del año pasado. El desgarrador relato de la mujer, con la voz quebrada y al borde del llanto, logró conmover al magistrado.
Lobo fue recibida durante esta semana en los Tribunales de Tucumán y reclamó justicia por su hijo Franco José Luis Lobo, quien circulaba en una moto por la ruta 38 y un auto lo chocó el 25 de diciembre pasado a la altura de Aguilares y perdió la vida.
Durante la reunión, la madre del joven que perdió la vida estaba acompañada por algunos familiares de víctimas de accidentes de tránsito en el sur de la provincia, y su historia logró conmover al magistrado y a otros funcionarios judiciales que estaban en el salón donde fueron recibidos.
“Señor a mi hijo lo chocó y mató un policía borracho cerca de las 19 en Navidad del año pasado. Es de apellido Gómez, iba con su novia cuando quisieron ingresar a un hotel y chocaron a Franco. Lo dejaron tirado más de tres horas y después los peritos han hecho lo que han querido. Por favor señor, quiero que me crea yo digo la verdad”, se escucha en el video en el momento del reclamo.
De acuerdo a lo que relató Azucena Lobo, su hijo de 23 años, había retornado desde Ushuaia (donde trabajaba) a su pueblo natal Río Chico, ubicado a unos 6 Kilómetros al sur de Aguilares, para pasar las fiestas de fin de año junto a su familia. Esa tarde del domingo 25 de diciembre, salió en su moto nueva para asentarla y por razones que se están investigando, a la altura del barrio Santa Rosa, en Aguilares, chocó con un auto en el que viajaba un agente de la Policía.
A causa de los golpes, Lobo falleció en el lugar. La mujer cree que los policías que fueron hacer a realizar los peritajes, manipularon la escena e incluso se animó a asegurar que los efectivos movieron el auto y la moto para cambiar la escena del choque.
“Yo misma corroboré cuando llegué al lugar del accidente que los policías habían movido el auto. Era fácil darse cuenta porque había una mancha enorme de aceite sobre el asfalto que marcaba donde sucedió el choque. Dentro del auto había botellas con bebida blanca y latas de energizantes. Mi hijo estuvo tirado 3 horas hasta que lo llevaron. Usted se imagina esa situación”, se preguntó la señora.
La investigación del hecho se encuentra en manos de Edgardo Sánchez, fiscal de la IV Nominación del Centro Judicial Concepción.
Lobo, junto a familiares de víctimas de accidentes de tránsito en el sur de la provincia, realizan todas las semanas una manifestación frente a las puertas del Centro Judicial Concepción, pidiendo que se aceleren y se resuelvan los casos que aún siguen impunes.
