El último sábado por la tarde, una mujer entró con un niño de cinco años a la vivienda de Miguel Antonio Tula en Tafí Viejo. Cuando salió a recibirlos, el hombre de 72 años fue inmovilizado.
Los agresores terminaron con los golpes y lo hicieron entrar a su casa, lo dejaron en la cocina y lo maniataron. Su hijo, que se había juntado con unos amigos entró a la casa y vio a su padre tirado en el suelo, salió a buscar a los atacantes pero no los encontró.
Si bien no supo precisar cuanta cantidad de dinero se llevaron, se sabe que se apoderaron de la recaudación del trabajo que realiza el hombre vendiendo verduras en un carro. La víctima está internado en una clínica de Tafí Viejo y por los golpes podría llegar a perder el ojo izquierdo.
Foto: Tafí Viejo es mi ciudad
