Matías Gabriel Valdez, un chico de 19 años murió en pocas horas luego de que sufriera una descompensación tras haber contraído dengue y dejó conmovida a toda Estación Aráoz. En las últimas horas, la epidemia ha empezado a expandirse en diferentes puntos del interior de la provincia pese a todos los cuidados y prevenciones realizadas.
En la casa del muchacho casi todos se habían contagiado. Primero la abuela, luego la mamá, que atravesaron la afección sin mayores dificultades. Sin embargo, desde el domingo, la familia se había preocupado luego de que Matías, el hijo mayor de la familia, empezara a sangrar la nariz. El muchacho fue hospitalizado pero regresó a su casa. El lunes acudió a la escuela y el martes volvió a desestabilizarse. Los dolores en la nuca y en la espalda y la fiebre habían empezado a hacer mella en el muchacho que ni siquiera podía comer. “Vomitaba cualquier ingesta”, explicaron en su familia.
Lo llevaron otra vez al hospital donde constataron que estaba deshidratado por lo que le aplicaron tres sueros para volver a estabilizarlo. Regresó a casa y volvió a sentir los síntomas. Pero estas idas y vueltas tuvieron el episodio más dramático cuando lo trasladaron durante la madrugada en una ambulancia desde Estación Aráoz al Centro de Salud.
Pese a los cuidados que allí le hicieron, el muchacho no pudo volver a recuperarse. “Empezó a ponerse morado y quedó sin aire. Lo llevaron a terapia y tuvo cinco paros”, afirma Marcela, la madre de Matías.
El chico estaba cursando el último año en la escuela Agrotécnica Amalia Hernández de Castillo. Soñaba con su viaje de egresados y tenía planeado seguir estudiando administración de empresas.
Acerca del fallecimiento del muchacho las autoridades confirmaron que fue atendido dos veces pero que registraba un cuadro de hipotensión y hemorragia.