En noviembre, los precios de los combustibles en Argentina volverán a subir, con un aumento que se estima superará el 5%, afectando tanto a la nafta como al gasoil. Este ajuste se produce luego de una baja en octubre, impulsada por la caída en el precio internacional del crudo, que ahora comienza a recuperarse. Las petroleras decidirán el porcentaje exacto al inicio del mes, en un contexto de inflación y devaluación que también inciden en los costos.
El precio del crudo Brent, que sirve como referencia, subió un 7% desde el inicio del mes pasado, pasando de US$ 71 a cerca de US$ 76 por barril. Este incremento, junto con la inflación de octubre estimada en un 3% y el impacto de la devaluación mensual del 2%, son factores que impulsarán el ajuste en los surtidores. Sin embargo, las ventas de combustibles han caído significativamente, registrando en septiembre una baja del 11,7% en comparación con el mismo mes del año anterior, según datos de la Secretaría de Energía.
Además del combustible, en noviembre también subirán otros servicios esenciales. Las empresas de medicina prepaga, por ejemplo, ya informaron a sus clientes que aplicarán aumentos que van del 3,9% al 6,9%, superando la inflación proyectada de octubre y el índice oficial de septiembre, que fue del 3,5%.
