Una valija, colillas de cigarrilos, una linterna y un cofre-tipo alhajero-fueron algunos de los elementos que un equipo científico especializado retiró durante una inspección realizada en la casa de Pablo Maximiliano Mariotti, en el marco de la investigación de su crimen.
Estos elementos son de interés para los especialistas científicos: cada uno de ellos son potenciales objetos de prueba. Lo que buscan los especialistas es material ADN que pueden contener estos objetos a la hora de ser comparados con cada uno de las cuatro personas que se encuentran detenidos por el hecho. No obstante, Lucas Gordillo, el principal sospechoso de haber terminado con la vida de Mariotti, sigue en calidad de prófugo.
Bomberos de la Policía Federal realizaron nuevas pericias en el domicilio de La Madrid al 1.300, que había sido incendiado en el marco del crimen de Pablo Mariotti. Las medidas fueron solicitadas por la Fiscalía en Delitos Complejos I, a cargo de Mariana Rivadeneira.
Además, el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) buscó elementos de valor para la pesquisa. En el marco de la instrucción, la fiscal Rivadeneira solicitó la prisión preventiva por 18 meses para tres de los coautores: Solange Manzanares Beltramino, Rolando Morán y Yamil Salis.
El cuerpo de Mariotti fue hallado en la noche del jueves 20 de febrero pasado, enterrado en un pequeño jardín de una propiedad de calle Olleros al 100, al sur de la capital. Estaba atado con precintos y cubierto con una colcha, entre otros elementos.
En el lugar también se encontraron documentación del fallecido, como su pasaporte, títulos y papeles del inmueble, además de una mochila.
El resultado de la autopsia realizada a la víctima, de 36 años, tras el hallazgo, confirmó como causa de la “asfixia por ahorcamiento”.