El abogado defensor de María Berta Poliche, la odontóloga que se había entregado por atropellar a la joven Paula Argañaraz y luego huir del lugar, confirmó que el verdadero responsable del choque fue el hijo de la odontóloga, que tiene apenas 16 años de edad.
Arnaldo Ahumada, el abogado defensor confirmó que fue el adolescente quien conducía el vehículo, por lo que ahora esperan que el Juzgado de Menores resuelva su situación. “Manejaba él. Lo pusimos a disposición. Todo dependerá ya del Juez de Menores”, aseguró.
El letrado, acompañado por la codefensora Fernando Battig, presentaron al adolescente de 16 años (su nombre no puede ser publicado por cuestiones legales) en Tribunales. El fiscal Diego López Ávila, lo atendió y le dijo que no tomaría ninguna medida en su contra hasta que tenga los resultados de las pericias. “No importa lo que se diga; la clave está en probar quién manejaba el auto”, indicó el investigador.
La joven de 20 años, estudiante de medicina, cruzaba la calle el domingo a la madrugada cuando fue arrollada por un vehículo que huyó del lugar. La chica fue trasladada al hospital Padilla y de ahí a un sanatorio donde se encuentra aún inconsciente.
El lunes, a través de sus abogados, Poliche se puso a disposición de López Ávila para que la investigaran. El martes se allanó su casa y de allí se incautó un Honda Fit gris con el que supuestamente atropellaron a la joven. La mujer, de 44 años, quedó detenida y por la tarde se presentó a declarar. Sin embargo, antes de que lo hiciera, el fiscal le advirtió que tenía numerosos elementos que serían analizados y que su confesión no alcanzaría para demostrar su culpabilidad. Después de escuchar ese planteo, la odontóloga rompió en llanto y decidió finalmente que no respondería a las preguntas. Luego, los defensores solicitaron una eximición de prisión, pero el planteo fue rechazado por un juez de instrucción.
El fiscal habría constatado además que la odontóloga había participado el sábado a la noche de una reunión con personas que practican trekking. Según el relato de algunos testigos, la mujer habría permanecido en ese lugar hasta la 2.30 aproximadamente. Los investigadores estiman entonces que podría haber llegado a su casa del country una media hora después, alrededor de las 3.
Lo que faltaba establecer era qué ocurrió hasta pasadas las 4, hora en la que se produjo el accidente. Se sospecha que el adolescente, con o sin permiso de su madre, tomó el auto y salió a dar vueltas por Yerba Buena.
Incluso, en las cámaras de seguridad de una estación de servicio ubicada a pocas cuadras de donde fue arrollada la estudiante de medicina, se descubrió que el auto se había detenido a cargar nafta. López Ávila pidió entonces ubicar al playero que lo había atendido para que prestara testimonios en la causa.
La Justicia no había terminado de ordenar esa medida cuando Ahumada admitió que el menor había sido quien protagonizó el accidente. López Ávila, después de atenderlo, le confirmó que la situación procesal de la acusada no cambiaría por el planteo que había realizado, y que citaría al joven una vez que termine de analizar todas las pruebas que está recibiendo. Sin embargo, tuvo que dejar su celular en la fiscalía.
“No voy a tomar ninguna decisión hasta que tenga los resultados de las pericias. Esto se agrava cuando se deja abandonada a una persona. Si quien manejaba no hubiese abandonado a la chica, si llamaba a emergencias y se ponía disposición de la autoridad, estaríamos hablando de lesiones culposas”, explicó.
El fiscal espera que personal de la División de Delitos Telemáticos termine de analizar las imágenes que quedaron registradas en las cámaras de seguridad de la provincia y de los comercios de la zona. Además, según trascendió, aguarda que las autoridades del Jockey Club le remitan lo que ellos registran en la entrada del country, que hasta el momento no fue aportado. Al mismo tiempo, también podrían declarar los guardias, quienes podrían informar quién manejaba el vehículo la madrugada del sábado.
En cuanto a la odontóloga, si se comprueba que su hijo es el responsable, a ella no podrían imputarle un delito a la odontóloga, porque no se puede acusar de encubrimiento a la madre de un imputado. Tampoco se la podría enjuiciar por falso testimonio, ya que esta figura sólo le cabe a los testigos y ella fue presentada como imputada. Tampoco existen los elementos necesarios para que se la acuse de obstrucción a la Justicia, puesto que ella entregó el auto y otros elementos que pueden ayudar a la investigación.
El fiscal Diego López Ávila deberá probar las declaraciones que hará el adolescente. En caso de que se confirme que él conducía el auto que atropelló a Paula Argañaraz, será puesto a disposición de Judith Solórzano, jueza de Menores. Ella deberá decidir si pedirá que al menor lo alojen en el Instituto Roca hasta que defina si le dictará, o no, medidas tutelares. Al tener 16 años, se le puede imputar el delito, que en este caso sería lesiones culposas agravadas por no haberse quedado en el lugar y no haber pedido ayuda para la joven. Será juzgado por un Tribunal, pero la condena será dictada por la jueza de menores.
Civilmente deberá responder la madre por ser la dueña del vehículo. Pese a que los padres del adolescente están divorciados, ambos deberán responder futuras acciones, ya que no se confirmó aún si el joven tenía licencia de conducir. Si se confirma ese rumor, será muy poco probable que la compañía de seguro cubra el siniestro.