El 13 de enero de 2016, una mujer mostraba un departamento de su propiedad ubicado en San Juan al 600 a un probable inquilino. Sin embargo, el hombre le robó sus pertenencias y le amputó la mano para sustraerle un anillo de oro.
Por ese hecho el individuo fue condenado a 10 años de prisión.
El Fiscal de Cámara, Carlos Saltor, encargado de llevar adelante la acusación por parte del Ministerio Público Fiscal, comentó que “el imputado, Mauro Ezequiel Godoy, escuchó la sentencia emitida por unanimidad por el Tribunal de la Sala VI de la Cámara Penal. Llegó al debate acusado de haberle propinado una feroz golpiza a una mujer (su identidad se reserva) para robarle en un departamento de San Juan al 600”.
Según contó el fiscal, la violencia y saña que ejerció este individuo sobre su víctima derivó en que la misma tuviera que ser sometida a seis cirugías en su rostro para poder reconstruirlo, debido al daño recibido. “No obstante, el momento de mayor gravedad se dio cuando este sujeto, que ya se había apoderado de las pertenencias de la víctima, tuvo la cruenta idea de cortarle un dedo con un cuchillo sierrita para apoderarse de un anillo”, agregó.
Sobre la tarea investigativa de la justicia, Saltos afirmó: “se hicieron cruces de llamadas desde los teléfonos con los que el agresor había estado comunicándose con la víctima cuando puso la propiedad en alquiler. Además, cuando los investigadores ingresaron al departamento tras el hecho, encontraron una campera con pelos que fueron comparados genéticamente con el sospechoso vía ADN, confirmando que eran suyos”.