Una curiosa leyenda apareció en el edificio ubicado en Virgen de la Merced 157, en la capital de Tucumán. En ese lugar funciona el Partido Justicialista (PJ). La consigna, “La traición al pueblo no se olvidará jamás”, fue colocada justo cuando el gobernador Osvaldo Jaldo, vicepresidente de ese espacio, se encuentra en Buenos Aires negociando algunos aspectos vinculados con la ley ómnibus.
Según lo indicado en reiteradas oportunidades, el dirigente tucumano argumentó que el dictamen de mayoría, avalado por su administración, responde a que el gobierno del presidente Javier Milei atendió algunas cuestiones esenciales para el desenvolvimiento de la economía, como el arancel cero para el limón y sus derivados y la marcha atrás para la derogación de la Ley de Azúcar, que hubiese permitido la importación de producciones de otros países.
En la actualidad, Jaldo insiste con las modificaciones a la Ley de Biocombustibles, con el fin de favorecer al bioetanol de caña de azúcar. Sin embargo, recibió una embestida política por parte de dirigentes nacionales, incluyendo los de la CGT, quienes fustigaron al mandatario tucumano con calificativos de traición, en virtud de su apoyo a la ley Bases.
Fuente: La Gaceta
