El sábado 27 de julio, agentes de la Dirección de Salud Ambiental de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán clausuraron un bar ubicado en calle 24 de Septiembre al 1300 debido a la generación de ruidos molestos que superaban los límites permitidos, en respuesta a numerosas denuncias de vecinos.
La directora de Salud Ambiental, Clara Saslaver, informó que la clausura se realizó después de que se constatara la presencia de ruidos molestos con un decibelímetro que marcó 73 decibeles, superando el límite permitido de 60 decibeles. “En base a una denuncia de un grupo de vecinos, realizamos las actuaciones el mismo día a la noche”, explicó Saslaver.
La funcionaria destacó que estos controles son parte de la ordenanza 4247/2010, que prohíbe la generación de ruidos molestos en la capital, y que la actual gestión municipal ha intensificado los esfuerzos para prevenir la contaminación sonora. “Nuestra misión es que el vecino tenga una relación armónica con la parte privada y podamos vivir en convivencia de una manera ordenada”, subrayó Saslaver.
Además, Saslaver recordó que el ruido molesto es un contaminante que afecta la salud de diferentes formas, como el estrés, el insomnio y la taquicardia. Instó a los vecinos a denunciar ruidos molestos de manera presencial, de lunes a viernes, de 8 a 13, en Alberdi 230, o a través de la línea de WhatsApp 3812230563, de Atención al Ciudadano, para que el Municipio pueda actuar.
Desde la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, a cargo de Julieta Migliavacca, y bajo la indicación de la intendenta Rossana Chahla, se han profundizado los controles para asegurar el cumplimiento de la ordenanza y mantener una ciudad libre de contaminación sonora.
