Aunque se trata de un caso importado y todavía no se confirmó la circulación comunitaria, hay preocupación en la comunidad médica, porque esta variante es más contagiosa y podría poner riesgo todo el sistema.
El escenario hoy de la pandemia de coronavirus en Tucumán es similar a lo que pasó en agosto del año pasado; es decir previo a septiembre y octubre, cuando se produjo un gran aumento de contagios. Así lo explicó, Gustavo Costilla Campero, vicepresidente de la Sociedad Argentina de Infectología y jefe de ese servicio en el hospital Padilla.
– La variante, denominada p1, de la cepa Manaos, ¿es más contagiosa?
-Sí. Lo que se conoce hasta ahora es que se trata de una variante más transmisible. En este caso es dos veces o más contagiosa que la cepa original, que la variante original.
-¿En Argentina hay pacientes con esta variante?
-Sí. En varias ciudades del país; justamente ha sido producida por viajeros y el inconveniente es que termine desplazando a la cepa original y eso implica que habrá mucha más gente afectada. La preocupación que tenemos desde el sistema de salud es que esta variante (Manaos) puede eludir el sistema inmune de las personas que ya tuvieron covid-19 y puede contraer la nueva variaante. Por ejemplo, algo similar a lo que pasó con el dengue.
-¿Es decir que las personas que ya tuvieron covid-19, pueden volver a tener con la cepa Manaos?
-Sí. Es muy probable. Todavía se está investigando en cuánto elude el sistema inmune a los anticuerpos generados por las vacunas.
-¿Esto quiere decir que habrá que cambiar las vacunas?
-Se considera que las vacunas tendrán que ser rediseñadas para dar una mejor cobertura.
-¿Cuál es el escenario hoy en Tucumán?
– El escenario está como en agosto del año pasado; es decir previo al gran aumento que tuvimos en septiembre y en octubre. Diría que es tal cual lo que pasó en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) con un pico de brote y nosotros estamos como unas semanas por atrás de esas cifras.
-¿Qué cifras tendríamos que tener de contagios para estar más o menos tranquilos?
– Tendríamos que volver a menos de 100 casos diarios;
esa es la única manera de disminuir la transmisión comunitaria. Ya tuvimos un promedio de 100 casos diarios y luego pasamos a 200; después pasamos a 400 y
ahora estamos entre 600 o 700. Eso muy arriesgado.
-¿Cómo impacta en el sistema este nivel de contagio?
– Todavía el sistema puede dar respuestas, pero podemos entrar en un mismo escenario que AMBA en las próximas tres semanas; por eso es importante que se cumplan los protocolos. Hay que generar conciencia sobre la importancia que tiene este momento para no entrar en una fase rápida. El tema de la saturación del sistema no es que la persona con covid-19 no puede ser asistida, sino que otras patologías tengan asistencia. Por ejemplo, pacientes con una fractura de cadera o un abdomen agudo o un infarto. Ese es el problema; no solo por covid-19.