La difusión del audio de una cirujana plástica porteña que compró un departamento de 200 mil dólares en el Country Nordelta, del partido bonaerense de Tigre , se viralizó en las redes sociales y desató todo tipo de críticas y respuestas.
El mensaje estaba dirigido a una mujer de la administración del condominio con expresiones discriminatorias y descalificadoras hacia algunos vecinos que “toman mate como en la costanera Bristol de Mar del Plata“, a los que tilda de “bestias“, y argumenta que tiene “un problema visual y estético, no puedo verlos”
“Yo soy una cirujana, una mujer normal, pero tengo determinados códigos de estética visual y de estética moral. Te lo digo a vos porque me caíste genial, porque sos una divina y porque estuve hablando con el desarrollador y es amigo del ministro (de Hacienda, Nicolás) Dujovne y somos amigos de gente de acá del gobierno y la verdad que tenemos un mismo perfil estético, moral y ético, y me parece que la gente que compró en el Acqua difiere mucho de eso“, comienza la médica desde Nordelta.
“Te cuento: la gente no se ve mala, se ve buena, pero se ve que es una gente que viene de barrios visualmente no muy buenos y, la verdad, que a mí no me divierte estar en Nordelta mirando el lago y viendo gente que en una «reposera de Mar del Plata» se va al muelle y toma mate. Para eso, no compraba, no invertía 200 mil dólares, más todo lo que va a salir, y me quedaba en mi propio campo o me compraba una casa por 350 mil o 500 mil. Yo no tengo problema de guita, no soy millonaria, me va bien en la profesión, nada más, pero sí tengo problemas visuales; yo a este departamento se lo compré a mi hija, que tiene 15, para que el día de mañana venga con sus amigas. No me divierte ver gente al lado de la pileta tomando mate, cual «Costanera», sin menospreciar ni a la gente que toma mate o va la Costanera, quiero que te quede claro, Michelle. Yo soy una mujer normal, una cirujana, pero tengo determinados valores morales y estéticos y me molesta ver a un grupo de gente que lleva el perro a la pileta. Vos tenés que estar en la piscina, tomando sol y escuchando los ladridos del perro y mirando cómo esas «bestias», porque no tienen educación, gritan y toman mate como si estuviéramos en la «Costanera Bristol de Mar del Plata»”, dice la cirujana en los minutos iniciales de su audio.
“La verdad que yo quisiera que este mensaje se lo envíes a Guillermo, el que coordina, y al intendente del edificio, porque si esto sigue así yo lo vendo. Así como lo compré lo vendí. Yo quiero descansar sobre todo visualmente, visualmente. A mí me molesta que estas «bestias», porque son «bestias», no tienen el mínimo de educación, porque en lugares comunes creen que son lugares privados, toman mate, tiran la yerba, estaban ayer reunidos y el Día de la madre con el perro al lado de la pileta, el perro gritaba (ladraba), un «cache…», una cosa de cuarta categoría, una cosa de «la Bristol de Mar del Plata», quiero decirte que no soy ni Máxima Zorrequieta, la reina de Holanda, soy una mina normal, que le gustan determinados parámetros estéticos como poder estar en Punta del Este, que nadie se a poner va a tomar mate en José Ignacio. ¿Me entendés lo que te digo?”, señala la nueva vecina de Nordelta.
“Después vinieron los del duplex, que los tengo casi abajo, gritando con los chicos. Los chicos gritan, no se respetan los horarios de la siesta, rompieron todo el arenero, pusieron arena arriba de unos decks que hay para sentarse, la verdad que la gente es de décima categoría, yo no sé si los departamentos están regalados, yo pagué un ambiente 200 mil dólares, no me parece nada barato, yo vivo en Palermo Chico, en ese momento era igual que en Palermo Chico, pero te pido, Michelle, por la onda que tenés, que hablás conmigo, con el desarrollador, que hablés con Achaval Cornejo, yo creía que había otra onda en el edificio, una onda más «cool», una onda más relajada, la verdad que es gente «muy de cuarta», sin modales“, abunda la médica.
“Propuse poner un «pass» electrónico y me dijeron que era caro. ¿35 mil pesos entre 70 personas? No me parece mucho cuando hiciste una inversión de 200 mil ó 300 mil dólares. La verdad que «tomar mate, como en la Bristol» no se puede y el perro me tiene harta”, concluye, enojadísima, la cheta de Nordelta.
Los memes no se hicieron esperar: